La compañía china apuesta por la inferencia como clave para ganar terreno en el competitivo mercado de la inteligencia artificial.
Huawei está intensificando su esfuerzo por capturar una mayor cuota del mercado chino de chips de inteligencia artificial (IA), dominado actualmente por Nvidia.
La empresa busca posicionar sus procesadores Ascend como la alternativa preferida para tareas de «inferencia», un componente crucial en el funcionamiento de modelos de lenguaje avanzado (LLM, por sus siglas en inglés).
En lugar de competir directamente con Nvidia en la etapa de entrenamiento de modelos, Huawei se centra en la inferencia, el proceso que permite a los modelos generar respuestas a partir de una solicitud.
Según Georgios Zacharopoulos, investigador senior en el laboratorio de Huawei en Zúrich, «el entrenamiento es importante, pero solo ocurre unas pocas veces. La inferencia, en cambio, servirá a más clientes».
Un mercado en transformación
El mercado de la IA en China está experimentando una transformación impulsada por restricciones de exportación impuestas por Estados Unidos. Estas limitaciones han dificultado que las empresas chinas accedan a los chips más avanzados de Nvidia, como los H100.
Sin embargo, las versiones menos potentes, como los H20 diseñados específicamente para cumplir con las regulaciones de exportación, siguen siendo muy demandadas.
A pesar de estos desafíos, Huawei ha logrado avances significativos. En 2024, la compañía vendió la mitad de los chips de IA que Nvidia en China, con estimaciones de SemiAnalysis que indican que Nvidia generó U$S 12,000 millones en ventas con 1 millón de chips H20. Huawei, por su parte, incrementa rápidamente su capacidad de fabricación para reducir esta brecha.
Desafíos técnicos y estratégicos
Aunque los chips Ascend 910B de Huawei son competitivos a nivel individual, enfrentan problemas de conectividad entre chips al entrenar modelos grandes. Lin Qingyuan, analista de semiconductores en Bernstein, explicó: «Cuando se entrena un modelo grande, es necesario dividirlo en tareas más pequeñas. Si un chip falla, el software debe redistribuir las tareas sin causar retrasos».
Huawei también se enfrenta a la tarea de convencer a los desarrolladores de abandonar CUDA, el software de Nvidia que acelera significativamente el procesamiento de datos. Sin embargo, la compañía está desarrollando una nueva versión de su chip, el Ascend 910C, que promete mejoras tanto en hardware como en software, facilitando su adopción.
Apoyo gubernamental y una estrategia diferenciada
El gobierno chino respalda los esfuerzos de Huawei, instando a las empresas locales a priorizar la compra de sus chips en lugar de los de Nvidia. Esta estrategia busca reducir la dependencia de tecnología extranjera y fomentar el desarrollo de soluciones locales.
Además, el enfoque en la inferencia refleja una dinámica única en el mercado chino. A diferencia de Estados Unidos, donde empresas como OpenAI y Google compiten por construir mega-clústeres de GPUs avanzadas, las compañías chinas están optimizando los costos de inferencia para comercializar aplicaciones de IA más rápidamente.
Un ejemplo de esta tendencia es DeepSeek, una startup con sede en Hangzhou y Pekín, que recientemente lanzó su modelo V3. Este modelo utiliza técnicas como el «Mixture of Experts» para reducir los costos de entrenamiento e inferencia, haciéndolo compatible con los chips Ascend de Huawei.
El futuro de Huawei en IA
Aunque Huawei enfrenta limitaciones en el suministro de chips y desafíos técnicos, su enfoque en la inferencia y el apoyo gubernamental podrían darle una ventaja estratégica en el mercado chino. Dylan Patel, analista jefe de SemiAnalysis, señaló: «Aunque Nvidia sigue liderando, la brecha se está cerrando rápidamente gracias a los esfuerzos de Huawei».
La competencia entre Huawei y Nvidia no solo definirá el futuro del mercado de IA en China, sino que también podría sentar precedentes para la industria global en un entorno geopolítico cada vez más complejo.